Consejos para la elección del cachorro.
Consejos y sugerencias para la selección y elección del cachorro como punto de partida y así garantizar una convivencia óptima, es nuestro objetivo más importante.
Requisitos:
Compatibilidades con el guía o propietarios:
- Físicas. Cada raza tiene características morfológicas y físicas propias, tenemos que elegir aquella que sea compatible con nosotros. El tamaño es importante, ahora es pequeño pero crecerá y será difícil manejarle si existe demasiada diferencia de tamaño y fuerza con los propietarios.
- Psicológicas. También debemos elegir al cachorro que se ajuste a nuestras características emocionales.
Raza:
- Mestizo. No disponemos de ninguna información sobre su genealogía y por tanto desconocemos su tendencia genética y evolución física, tamaño, etc. Pero actualmente estamos necesitados de familias que adopten mestizos por lo que nos tenemos que sensibilizar con esta necesidad.
- Raza. Conocemos su procedencia y árbol Genealógico, tenemos la información sobre su morfología y características de la raza.
Edad.
De la 7ª a la 8ª semana de vida del cachorro es el momento de irse a su nuevo hogar. No separarlo de su madre y hermanos antes de la octava semana y tampoco dejarlo más de la novena para separarlo.
Sexo.
Macho/Hembra, estas son algunas de las diferencias del sexo.
- Físicas: Tamaño, Peso, Potencia mayor en los machos.
- Fisiológicas: Celo en las hembras.
- Temperamentales: Dominancia, Territorialidad, Vagabundear, Desobediencia, etc, más frecuentes en los machos. Cariñosas, Apegadas y Obedientes más frecuentes en las hembras.
Educación del cachorro, desarrollo del liderato y vínculo.
Para conseguirlo el dueño debe hacer:
- Satisfacer sus necesidades: Comida, alojamiento, atención, etc.
- Crear rutinas: Los paseos, la comida, el baño e higiene corporal, la clase, los juegos etc.
- Horarios lo menos arbitrarios posibles.
Para convertirnos en el líder y a la vez incrementar el vínculo:
- El Juego: Actitud positiva, lúdica y además, así minimizaremos las correcciones y optimizamos el vínculo. Para el cachorro representa una forma de integración en la familia, encuentra su rango social dentro de la manada. El perro aprende a leer nuestras expresiones corporales, distinguir nuestro estado de ánimo según el tono de nuestra voz, etc.
- La Clase: Mediante la clase diaria conseguimos mantener la disciplina. Reforzamos el papel de líder y la autoconfianza del cachorro.
- Los Paseos: Aprende que existen períodos de relax y que no tiene que estar trabajando continuamente. Además, va asociando las vivencias y experiencias que se le presentan. Durante los paseos podemos utilizar todo lo que nos encontremos en la ciudad: bancos, ruidos, coches, motos, personas en bicicleta, personas corriendo, niños de todas las edades, personas con paraguas, otros cachorros o adultos, etc.
- El Cepillado: Al cepillar al cachorro estamos sometiéndolo a un manejo y control de su cuerpo, marcando quién es el líder y desarrollando el vínculo. Además le estamos desensibilizando, porque estamos manipulando y tocando todas las partes de su cuerpo, evitando la aparición de estrés que pueda producir en el perro el manejo y tocamientos físicos.
Que no hay que hacer:
- Castigarle con el collar o correa.
- Castigarle por no aprender acciones.
- Castigarle progresivamente.
- Ser inconsciente en el castigo.
- Causarle dolor físico.
- Causarle un shock emocional (golpearle con periódicos, exageración de gritos…)
- Darle mucha importancia a su comportamiento.
- Mantener una actitud enfadada con el cachorro tras el castigo.
- Aplicarle castigos incomprensibles.
- Castigarle para que aprenda a hacer sus necesidades.
Listado general de tareas para con el cachorro.
- Mantener un horario de comidas regular y ningún acceso a la comida después de 30 minutos.
- Pasear con la correa.
- Restringir los movimientos del cachorro.
- Poner el cachorro en un área deseada para hacer sus necesidades:
- Inmediatamente después de despertarse.
- Inmediatamente después de jugar.
- Entre diez y quince minutos después de cualquier comida.
- Como mínimo 6 a 8 veces por día.
- Cada 1 a 2 horas sería lo ideal.
- No permitirle jugar hasta que no haya eliminado.
- Situarse en un área pequeña.
- Dejarle olfatear.
- Dar paseos de 15 a 20 minutos.
- Permitirle jugar y relacionarse después de que elimine.
- Hacer las correcciones de forma apropiada (sobresalto).
- Recompensar al cachorro después de que elimine.
- Reforzar los olores de otros perros y heces en zona correcta.
- Usar órdenes vocales.
- Ser paciente.
- Proporcionar juegos aeróbicos (saltos y carreras) en los momentos de no eliminación.
Para educar al cachorro debemos enseñarle desde el principio qué puede y qué no puede hacer. Para que esto pueda cumplirse lo primero que necesitamos es estar presentes para poder explicárselo. La primera conclusión es que debemos tenerlo vigilado siempre para poder premiar o reprimir una conducta. Como no podemos estar todo el día detrás del cachorro necesitamos un sistema que nos ayude o nos permita vigilarle cuando nos ausentamos.
Uso del transportín o perrera de plástico como complemento para la educación del cachorro.
Entiendo que esta medida o método pueda resultar a primera vista negativa porque pensamos que estamos encerrando a nuestro cachorro e imaginamos que a nosotros no nos gustaría que nos encerrarán, pero el perro es un animal de madriguera, lobera, cueva, cubil y él se siente muchos más seguro y confiado en un lugar, recogido, cálido, oscuro; si desarrollamos e incluimos esta rutina o costumbre en su educación, en el futuro será más equilibrado y tranquilo.
Yo recomiendo la utilización de un transportín o perrera de plástico para conseguir los objetivos, que nos servirá para varios fines distintos como:
- Lugar de descanso, es fundamental que el cachorro se sienta cómodo en su interior, por ese motivo el tamaño tiene que ser suficiente para que el perro pueda estar de pie y girarse sin dificultad.
- Como medida de disciplina, para que el cachorro no cometa fechorías hemos de evitar que tenga posibilidad de hacerlas.
- Limpieza del cachorro, evitando que esté suelto por la casa cuando estemos ausentes y educación del sistema eliminativo.
Consejos para la Adaptación a la perrera de plástico (transportin):
- Debe ser positiva para evitar problemas de ansiedad, estrés,..
- Para ello meteremos en su interior la cuna, cama o manta del cachorro y quitaremos o sujetaremos la puerta para evitar que se cierre.
- Podemos ayudarnos con premios en su interior, para conseguir que entre el cachorro si no tiene iniciativas.
- El perro es un animal de madriguera y por sí mismo entrará en la jaula sin que esto resulte una experiencia traumática para él.
- Cuando el cachorro esté habituado podemos cerrar la puerta.
- Aumentaremos el tiempo del confinamiento progresivamente, hasta conseguir que permanezca tranquilo y seguro durante el tiempo que consideremos necesario (toda la noche, mañana o tarde).
- Con frecuencia los cachorros lloriquean durante la noche para llamar la atención de su dueño y también con frecuencia éste cede al lloriqueo del cachorro y termina abriendo la puerta.
- Esto no debe suceder nunca porque el cachorro aprende enseguida que si llora, tarde o temprano el dueño le liberará.
- Debemos enseñar al cachorro que este es su sitio y que en determinadas situaciones y ocasiones debe permanecer allí.
Normas de entrenamiento o preadiestramiento para los cinco primeros meses de vida del cachorro.
Es muy importante porque en él se va a basar todo el éxito futuro en la convivencia con la familia. Conseguiremos tener a un individuo seguro y equilibrado, sin traumas, miedos, inseguridades, evitaciones, etc.
Podemos conseguirlo actuando según las siguientes normas:
- Trabajar con el cachorro en casa ordenes sencillas, como sentado, tumbado, acudir a la llamada, etc.
- Usar siempre estímulos y refuerzos positivos.
- El tono de voz es fundamental, hay que transmitir al perro el sentimiento adecuado en cada momento (aprobación, felicitación, reprimenda, corrección, etc), se trata de adaptar la voz, no de gritar.
- Contingencia y Simultaneidad, consiste en que la orden y la postura deben ocurrir simultáneamente y la recompensa debe ser inmediata para reforzar la asociación causa-efecto. Desde que el cachorro ejecuta la orden hasta que se le felicita no debe pasar más de 0,5 segundos.
- Cada palabra ha de tener un solo significado.
- Debemos jugar con el cachorro antes y después de cada sesión, antes para cansarlo un poco y tenerlo motivado y después para que la sesión termine de forma placentera para él y asocie así el juego con la clase. Esto hará que el cachorro esté expectante con cada clase porque sabe que será agradable para él.
- Las sesiones tendrán una duración mínima ya que es muy difícil mantener la atención y concentración del cachorro. La duración de las clases irá aumentando paralelamente al avance en el adiestramiento.
- A partir de los seis meses de edad aproximadamente será el momento ideal para aumentar, intensificar y completar la tabla de ejercicios de adiestramiento que tenemos diseñada para asentar la disciplina en nuestro perro en diferentes entornos.
Puntos Clave de Vinculación.
Potenciar el Vínculo y el Liderato.
Reunión tras la separación:
1. Al llegar a casa ignorar al animal mientras intente llamar la atención.
2. Esperar cinco minutos después de que el animal esté tranquilo para interaccionar con él.
3. No hablar ni regañar al animal, solo apartarle suavemente.
4. El comportamiento indeseable del animal produce una falta de atención por parte del dueño.
¿Quién protege la manada?
En momentos de peligro sólo el líder indica quién es bienvenido:
1. Al llegar alguien a casa, si el animal ladra, se le ignora para indicar que esa no es su función. El no debe proteger, ya que no es el líder.
2. Evitar que el invitado interaccione con el animal hasta que no esté tranquilo.
3. También se puede invitar al animal suavemente a otra habitación y premiarle cuando nos siga. Al salir de la habitación y volver con los demás nadie deber prestar atención al animal durante los primeros minutos.
¿Quién guía a la manada?
Es importante el momento del paseo, el líder siempre es el que guía a la manada, si el animal se cree líder irá tirando.
1. El amo debe salir primero de la casa.
2. El animal debe ir junto al amo, no delante.
3. Usar comida como recompensa. Si el animal tira de la correa el dueño debe pararse y permanecer quieto. Cuando el animal se pare a su lado, empezaremos con alguna orden, “sentado” y comenzaremos otra vez con junto.
¿En qué orden se come?
El líder come primero.
- Practicar comer primero los dueños y después ponerle la comida al animal.
- Es conveniente instaurar una pauta correcta de comidas: darle de comer dos o tres veces al día en lugar de dejarle la comida puesta, y siempre después de la comida de los dueños. Mejor comer después de los paseos, sobre todo si come mucha cantidad y en los paseos se mueve mucho.
¿Quién es el líder?
El líder decide lo que hace la manada.
1. Practicar controles básicos y premios: el animal debe aprender a seguir algunas órdenes sencillas:
- Se le debe premiar con comida (o juegos, caricias).
- Técnica de premio por obediencia.
- Respuesta a la llamada, sentarse, dar la pata, tumbarse, ir junto al amo.
2. Ninguna interacción entre el animal y los dueños debe empezarla el animal. Si él pide algo se le debe ignorar hasta que se tranquilice. Luego le llamamos e interaccionamos con él.
3. Todo aquello que el animal quiere y todo lo que le gusta se lo tiene que ganar, “nada es gratis”. Antes de cualquier interacción positiva para el animal hay que pedirle que lleve a cabo alguna orden sencilla: “sentado”, “pata”.